El voto en blanco es la manera como los ciudadanos muestran su rechazo a las propuestas, imagen o vida política de los candidatos que se presentan a las elecciones.
Por Silvana Aulestia. Estudiante de Comunicación Social, Universidad EAFIT – Medellín
Ahora que se aproximan las elecciones para Congreso de la República y Parlamento Andino (el domingo 9 de marzo) y para Presidencia de la República (el 25 de mayo) es necesario aclarar algunos mitos que existen en Colombia sobre el voto en blanco:
1. ¿Es un voto nulo? No
El voto nulo es un voto no válido debido a que en algunos casos las personas no tienen conocimiento sobre cómo marcar el tarjetón, y por ejemplo, los marcan donde no está permitido o hacen dibujos en ellos; por estas razones no son tarjetas electorales válidas. Eso no tiene nada que ver con el voto el blanco.
2. ¿Si gana el voto en blanco, se repite la elección? Sí
En una de sus cartillas divulgativas, la Registraduría Nacional recordó que, de acuerdo con el artículo 9 del Acto Legislativo 01 de 2009, «deberá repetirse por una sola vez la votación para elegir miembros de una corporación pública, gobernador, alcalde o la primera vuelta en las elecciones presidenciales, cuando el total de los votos válidos, los votos en blanco constituyan la mayoría”. Y anota: “Tratándose de elecciones unipersonales no podrán presentarse los mismos candidatos, mientras que en las corporaciones públicas no se podrán presentar a las nuevas elecciones las listas que no hayan alcanzado el umbral”. La Registraduría precisó que “la Corte Constitucional, en sentencia de 2011 declaró inexequible la norma de la Reforma Política que ordenaba repetir elecciones ‘cuando el voto en blanco obtenga más votos que el candidato o lista que haya sacado la mayor votación’. En consecuencia, la mayoría necesaria para repetir la elección es mayoría absoluta, es decir el 50% más 1 de los votos válidos, y no mayoría simple”.
3. ¿Se suman los votos en blanco al candidato que lidera? No
“La posibilidad que abren los sistemas democráticos de tener el voto en blanco es lograr que las personas expresen su descontento, pero de forma democrática”, aclara Andrés Felipe Preciado, asistente de Decanatura de la Escuela de Ciencias y Humanidades de la Universidad EAFIT, al referirse a que en ninguno de los casos el voto en blanco se suma al candidato que va liderando en el conteo de votos. “A los mismos políticos, al saber lo peligroso que es ese voto en blanco, les gusta mucho fomentar esos mitos como decir que esos votos se van para los ganadores”, explica Santiago Silva, politólogo de la Universidad EAFIT, columnista de El Colombiano e investigador del Centro de Análisis Político de EAFIT.
4. ¿Sin comité que lo promueva hay reposición de votos? No
Otro mito que existe es que quienes representan el voto en blanco, como es el caso de los movimientos en las redes sociales a favor del mismo, se van a volver millonarios o están ganando dinero con esos votos. Según ese argumento falaz, ese dinero es por la reposición económica que les hace el Estado a los candidatos por la cantidad de votos que obtienen en una elección. La verdad es que si no existe un comité que represente el voto en blanco no se le dará dinero a ninguna persona, pues la casilla que se marcará es la última en el tarjetón que no tiene ningún representante. “Si no hay comité inscrito, no hay reposición de gastos ni hay financiación”, explicó Carlos Ariel Sánchez, registrador Nacional del Estado Civil. Para las elecciones presidenciales sí hay un comité de impulso al voto en blanco. En ese caso, ese movimiento sí recibiría una compensación económica o “reposición”.
Conclusión: puede votar en blanco
Poco a poco, los colombianos han venido adquiriendo conocimientos políticos para hacer valer sus derechos como ciudadanos debido al descontento con la política nacional, la corrupción o las malas decisiones tomadas por los representantes en diferentes momentos de la vida nacional. Para no tomar decisiones equivocadas frente a este tema es importante enfatizar que votar en blanco NO es botar el voto, ya que es también una opción democrática válida.
El voto en blanco ocupa su lugar en cada tarjeta electoral. Aquí, el tarjetón para las elecciones presidenciales de 2010.
Este artículo es resultado de una iniciativa de las carreras de Comunicación Social y Ciencias Políticas, así como del proyecto Antioquia Visible, todos de la Universidad EAFIT, de la ciudad de Medellín. A través de emisoras y medios comunitarios del país, ofrecemos a la ciudadanía información útil, sencilla y práctica sobre pedagogía electoral. Porque estamos convencidos que solo con ciudadanos bien informados el voto será a conciencia y podremos construir entre todos un sistema electoral fuerte y una democracia más limpia y legítima.