Al posesionar al general retirado Óscar Naranjo como vicepresidente de la República, durante una ceremonia cumplida este jueves en la Casa de Nariño, el presidente Juan Manuel Santos encargó al alto funcionario de cuatro tareas fundamentales: avanzar en la implementación del Acuerdo de paz, garantizar la protección de líderes sociales y guerrilleros que se reincorporan a la sociedad; profundizar la seguridad, en especial la seguridad ciudadana; e impulsar la aplicación de una política antinarcóticos más eficiente, que ataque los principales eslabones de la cadena del narcotráfico y que reduzca drásticamente los cultivos ilícitos en el país.
Sobre la implementación del Acuerdo de paz, el mandatario precisó que esta misión contempla tareas físicas orientadas a la reincorporación de los excombatientes a la sociedad, la puesta en marcha de los proyectos de desarrollo rural integral, el desminado del territorio y la debida operación del Sistema Integral de Justicia, Verdad, Reparación y No Repetición, entre otras.
Entre tanto, el nuevo vicepresidente respondió que “este juramento me recuerda el que un día hice para ingresar a la Policía Nacional, a la Escuela de Cadetes de Policía del General Santander. En ese momento, siendo un adolescente, juré respetar y hacer respetar la constitución y la ley, defender la integridad de la Nación y, como dice la Carta Política, a todos los residentes en su vida y bienes. Trasmito al país entero, en función de las responsabilidades que usted me asigna, señor presidente, que mi desempeño estará basado en una agenda absolutamente institucional, focalizada en la implementación de los acuerdos, a trabajar incansablemente y de manera coordinada con el gabinete ministerial para enfrentar los desafíos de la seguridad ciudadana y avanzar en la política de la lucha antidrogas”.
Finalmente, al tratar el tema de la lucha contra el narcotráfico, el presidente Santos dijo que al Gobierno le preocupa sobremanera el aumento de hectáreas cultivadas de coca, y reconoció que Colombia no ha dejado de ser, desde hace décadas, el primer exportador de cocaína del mundo.
En este sentido, el mandatario se refirió al plan, que será coordinado por el vicepresidente, para erradicar este año al menos 100 mil hectáreas de coca: 50 mil por erradicación forzada y 50 mil por erradicación voluntaria en desarrollo de los acuerdos de paz.
Naranjo fue elegido este miércoles como nuevo vicepresidente del país en sesión conjunta de Cámara y Senado, luego de que Germán Vargas Lleras renunciara a este cargo para postularse como candidato presidencial en 2018.