Los días viernes, sábado y domingo 22, 23 y 24 de abril, respectivamente, La Lonja de Medellín y Antioquia, realizará en el Centro Comercial San Nicolás en Rionegro, una nueva feria que ofrecerá: vivienda nueva, usada, arrendamientos, lotes, parcelaciones, fincas y bodegas. Allí también estarán entidades financieras y cajas de compensación familiar para mostrar las posibilidades de financiación y los subsidios disponibles para adquirir una propiedad.
“Tendremos la presentación de 106 proyectos inmobiliarios, 6 de ellos son de vivienda de interés social y casi 80 están en el rango de hasta los 500 millones de pesos. Hace tres años eran los proyectos de Rionegro, La Ceja, El Retiro, pero hoy ya vemos que en Marinilla, La Unión, El Peñol, El Carmen de Viboral, también hay una oferta inmobiliaria; no solo de lotes en parcelación, de casas y apartamentos”, dijo, en ASENRED, Federico Estrada, Gerente de La Lonja de Propiedad Raíz de Medellín y Antioquia.
Según el gremio, el Oriente Antioqueño es una de las subregiones con mayor crecimiento urbanístico y la segunda en el departamento con mayor dinámica inmobiliaria que en los últimos años ha crecido a un ritmo acelerado, convirtiéndose en una de las zonas más apetecidas por las personas para vivir e invertir.
“Las últimas cifras de la actividad inmobiliaria en la zona, a cierre de 2021, dan cuenta del gran potencial que tiene hoy el Oriente: se proyectan 9.500 transacciones inmobiliarias de todas las tipologías, un crecimiento del 22% respecto al mismo periodo del año anterior. En vivienda nueva 7.804 unidades vendidas, un incremento del 123,2% comparado con 2020 y en lotes urbanizados en parcelación un 87% de crecimiento y más de 2.000 ventas. Además, un total de 981.596 m2 autorizados en licencias de construcción, lo que ayudó al crecimiento del valor del suelo rural que ya es del 15,8%, consolidándose como una de las subregiones con mayores precios del suelo rural del departamento de Antioquia”, informó La Lonja.
Finalmente, se recomienda a las autoridades municipales tener los planes de ordenamiento territorial actualizados e invertir las obligaciones que se les cobra a los constructores en el territorio.