Este martes 27 de junio, como hace 17 años Granada marchó, en ambas ocasiones las motivaciones y deseos fueron los mismos: vivir en paz. En aquel diciembre del 2000, el pueblo vivió una toma de grandes proporciones que destruyó parte del casco urbano; a pesar de las muertes y de los daños causados, el 8 de diciembre de ese año, las fuerzas vivas del pueblo recorrieron las calles con un telón cuyo mensaje era, Granada: territorio de paz.
Celebre se convirtió la fotografía de Jesús Abad Colorado, quien desde una de las terrazas, registró el paso de los marchantes por el sector conocido como la ´variante´ precisamente uno de las manzanas destruidas, con el mensaje claro: Territorio de paz. Granada cree en la paz y trabaja por construirla, desde su fuerza comunitaria, ejemplo para el país.
Desde aquella época el telón hace parte del inventario de Jaime Montoya, activista de los derechos humanos, poeta y defensor de la paz. En la tela se puede apreciar una inmensa mano blanca abierta, símbolo de la mano amiga que necesita la paz y reconciliación del país. Mano abierta, mano dispuesta a ayudar y construir.
Mano abierta, que muestra la intención de desarme, de inocencia, de trabajo… “La mano abierta es el signo que más evidencia el desarmado saludo de la paz.”
El martes 27 de junio la ONU – Organización de las Naciones Unidas – certificaron la entrega del 100 % de las armas por parte de las Farc-, con lo que se da un paso fundamental en la transición de grupo armado a proceso político. Un día histórico para el país.
Por este hecho, precisamente Asovida –Asociación Unidas de víctimas por Granada- y la Administración Municipal realizaron un acto simbólico en el atrio del templo parroquial, y uno de los elementos más sobresalientes fue el telón, que 17 años atrás acompañó la marcha del 8 de diciembre del 2000, con el mismo mensaje, el cual cada día toma más fuerza, Granada: Territorio de Paz.
Fuente: Desde Granada