Tome nota de cuáles son y denuncie a las autoridades si es testigo de alguna de estas situaciones
Por Laura González Fernández. Estudiante de Comunicación Social, Universidad EAFIT – Medellín
¿Sabía usted que la Misión de Observación Electoral reportó 371 casos de irregularidades entre todos los ejercicios de participación ciudadana que se han llevado a cabo desde 2008 hasta comienzos de febrero de 2014? ¿Sabía que de esos 371 casos, Bolívar y Antioquia encabezan la lista? Y esos apenas son los descubiertos… No se engañe. En realidad, no se supone que nuestra democracia deba ser amedrentada por fraudes electorales. Sin embargo, así es. Ni usted ni yo vivimos en una Colombia de procesos electorales ciento por ciento transparentes. El problema no es tanto el sistema: el problema son las personas. En la búsqueda de poder y dádivas económicas, tanto grupos políticos, grupos sociales, grupos armados y servidores públicos han sido gestores de artimañas que hoy en día carcomen el cuerpo de una democracia desgastada en esfuerzos por mantenerse legitimada. Precisamente por esta situación, su voto podría estar en juego en cualquiera de las siguientes modalidades de fraude que ya se encuentran consignadas dentro del Código Penal colombiano en tanto son consideradas como delitos.
Perturbación a certamen democrático (4 a 9 años de cárcel)
Se presenta, por ejemplo, cuando se da a los ciudadanos falsa orientación sobre su sitio de votación o le dan indicaciones equivocadas sobre el procedimiento electoral.
Intimidación al votante (4 a 9 años de cárcel)
Ocurre cuando se obliga a una persona a que no asista a ejercer su derecho de votación o cuando le exigen que vote en blanco o por algún candidato en especial.
Fraude al votante (4 a 8 años de cárcel)
Un caso típico es si lo engañan para que vote por algún partido o candidato distinto al que usted quiere.
Trasteo de votos (3 a 6 años de cárcel)
Se da cuando fraudulentamente inscriben su cédula en un lugar distinto del que usted haya nacido o viva.
Compra de votos (3 a 5 años de cárcel y una multa de 100 a 500 salarios mínimos legales vigentes)
Lastimosamente es una práctica muy vieja y muy utilizada: es cuando se soborna a un ciudadano a cambio de su voto, prometiéndole dinero, ayuda en especie o algún puesto burocrático.
Voto fraudulento (4 a 8 años de cárcel)
Ocurre cuando alguien falsifica su cédula y lo suplanta en el momento de la votación.
Favorecimiento de voto fraudulento (4 a 8 años de cárcel)
Si un servidor público permite que usted sea suplantado o que vote más de una vez, incurre en este delito.
Demora en la entrega de resultados electorales (16 a 54 meses de cárcel)
Es para aquel servidor público o jurado de votación que realiza una entrega inoportuna e injustificada de los votos a la Registraduría Nacional.
Alteración de los resultados electorales (4 a 8 años de cárcel)
Por da, por ejemplo, cuando un votante introduce tarjetones inválidos en las urnas.
Ocultamiento, retención y petición ilícita de la cédula (4 a 8 años de cárcel)
Se presenta si cuando está próximo un proceso electoral algún funcionario no le hace entrega de la cédula por primera vez, o si destruyen su cédula o la retienen para garantizar que el día de las votaciones usted vote por un partido o candidato en específico.
Denegación de la inscripción de cédula electoral (16 a 54 meses de cárcel)
Es cuando un servidor público le niega la correspondiente atención para la inscripción de su cédula.
Como vemos, ni son pocas ni son pequeñeces. Alguna vez Victoria Camps, filósofa española, dijo: “La democracia necesita una virtud: la confianza. Sin su construcción, no puede haber una auténtica democracia”.
La pregunta es: ¿en Colombia hay confianza construida detrás de nuestros intentos democráticos? O quizás… ¿habrá un afán desmedido de algunos por hacer valer más sus propios intereses que los de un país que debería detenerse mejor a repensar sus principios?
Apreciado ciudadano, pregúntese usted a dónde fue a parar la autenticidad de nuestra democracia y si la respuesta no lo deja muy satisfecho, haga todo lo posible para que haya transparencia y limpieza en las próximas elecciones.
Foto revista digital Bitácora – Comunicación Social EAFIT
Este artículo es resultado de una iniciativa de las carreras de Comunicación Social y Ciencias Políticas, así como del proyecto Antioquia Visible, todos de la Universidad EAFIT, de la ciudad de Medellín. A través de emisoras y medios comunitarios del país, ofrecemos a la ciudadanía información útil, sencilla y práctica sobre pedagogía electoral. Porque estamos convencidos que solo con ciudadanos bien informados el voto será a conciencia y podremos construir entre todos un sistema electoral fuerte y una democracia más limpia y legítima.
